La artista británica recientemente anunció que ella y su novio, Simon Konecki, estaban esperando su primer hijo juntos. Esta buena noticia se ha convertido en el colofón de un año lleno de premios conseguidos gracias a su último álbum, '21'.
"Adele y Simon sienten amor verdadero. Se han comprometido el uno con el otro y están listos para iniciar una familia. Adele siente que quedarse embarazada ha sido como tocarle el gordo. De hecho, el otro día dijo: 'He estado en la cumbre durante un año, en mi vida personal y profesional, pero lo mejor está aún por llegar'", explicó una fuente.
A la cantante no le preocupan los cambios físicos que implica el proceso de gestación, por lo que no duda en disfrutar de sus platos favoritos.
"Adele le dijo a sus amigos que está contenta de tener barriga de embarazada. Ella bromeó diciendo que se conformará comiendo pasteles de carne hasta que pueda hacerse con las vacas enteras", añadió la fuente a la revista Closer.
Además, Adele no escatima en gastos para asegurarse de que su bebé tiene todo lo que necesita.
"Está construyendo habitaciones para el bebé en todas sus casas. Ha instalado controles de temperatura y cámaras, así que podrá controlarlo todo desde su portátil. Se ha gastado 28.500 euros tan solo en la iluminación y en el sistema de sonido", reveló un informador.
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