Cómo el pop coreano se convirtió en fenómeno en Chile

Canal coreano realiza nota sobre el fenómeno pop en Chile

En el segundo semestre del año pasado ya se hizo evidente que el pop proveniente de Corea está pegando de manera significativa en nuestro país, con un culto creciente y fervoroso que se manifiesta en miles de seguidores que además se conectan con los del resto de América Latina, Europa, Estados Unidos y Asia. El llamado K-Pop empezó a calar hondo en las nuevas generaciones locales desde 2009 y en la actualidad ya hay más de 300 grupos de baile y cerca de 40 agrupaciones coreanas que son seguidas religiosamente por las legiones de jóvenes.

Uno de ellos es el que confirmó recientemente su primer concierto en Chile, el trío JYJ (ver subtítulo), uno de los grupos que han llegado a sonar con fuerza en programas de televisión abierta como “Calle 7” de TVN y “Yingo” de Chilevisión. Y en otros del cable como ETC TV. Además de ellos, otros nombres como Super Junior, After School, SHINeee y So Nyuh Shi Dae hacen furor.

Esto ha sido potenciado además por los concursos de baile y canto que organizan desde hace un par de años, entre otros, la propia embajada de Corea.

En el último de ellos, realizado en noviembre, llegaron más de 80 grupos a audicionar, de los que quedaron 25. El año anterior el ganador fue Blue Boys, versionando a Super Junior. Los mismos Blue Boys son los que aparecieron en el programa “Valientes” de Canal 13, poniendo en pantalla el fenómeno. La iniciativa local es similar a otras que se hacen en el resto del continente, como en Buenos Aires, donde llega gente de varios países a una convocatoria que reúne a casi 100 grupos.

El K-Pop a nivel global explotó gracias a las posibilidades de difusión de la era digital, usando las redes sociales para expandir la cultura coreana. Un ejemplo: el single “Mr. Simple” de Super Junior, una de las bandas más emblemáticas, llegó a ser el tercer video de Youtube más visto en el mundo, después de Lady Gaga.

Al igual que algunas corrientes japonesas, en el pop coreano la gracia es que la imagen es una vía de expresión más, teniendo tanto peso como la música, y lo mismo corre para el despliegue escénico, ofreciendo canto y baile de manera integral.

Fusionando las raíces orientales con la influencia occidental, y cantando con una mezcla de coreano con inglés, los exponentes del K-Pop se comportan en el escenario como la más profesional de las megaestrellas de este hemisferio.

No es sólo música: la primera punta de lanza de la cultura coreana fueron películas y series, lo que derivó en el boom musical. Además, está claro que fue una consecuencia del arraigo japonés que hay en nuestro país desde hace muchos años, a través de animaciones y cómics. Hoy en día, lo coreanom en Chile implica también más negocios y restoranes, entre otras cosas.

Tanto ha llamado la atención esto, que hay medios coreanos que han venido a nuestro país a hacer notas sobre este fenómeno, como el canal de televisión que dedicó un reportaje a los seguidores del K-Pop criollos (ver video).

POR PRIMERA VEZ EN CONCIERTO

Los elegidos para ser el primer grupo de K-Pop en llegar a Chile es JYJ, que estarán el 9 de marzo en el Teatro Caupolicán, según se confirmó esta semana de parte de la productora Noix. Es la consecuencia de montones de campañas por Facebook para traer este estilo a Chile. JYJ es un trío conformado por Jaejoong, Yuchun y Junsu, cantantes de la reconocida agrupación Dong Bang Shin Ki (TVXQ), considerada hasta hoy como el grupo vocal masculino más vendedor de toda Asia.

JYJ se asoció en 2011 nada menos que con Kanye West, para que les produjera su álbum debut “The beginning” junto a Rodney Jerkins. De ahí salió el primer sencillo “Ayyy Girl”, producido por West, quien también pone su voz en la canción. Lo mismo que el maestro de la palabra hablada, Malik “El Poeta” Yusef.

ENTRADAS

Las entradas saldrán a la venta en los próximos días a través del sistema Feriaticket y los precios serán los siguientes:

VIP: $70.000
Preferencial (Cancha): $40.000
General: $20.000
*Valores no incluyen cargo por servicio.

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